Tatuadora con tres años de experiencia, destacándose en técnicas como: blackwork, dotwork y watercolor.
Su estilo se define por la precisión, el detalle y una composición cuidadosamente trabajada, dando vida a piezas únicas y expresivas. Apasionada por la creatividad, Inna transforma cada tatuaje en una obra de arte personalizada, fusionando técnica, colores y líneas para lograr diseños impactantes y llenos de significado.

En la profesión es una mezcla de arte, emoción y técnica, lo cual se refleja en la satisfacción que genera con cada trabajo. Sin duda, el amor por su oficio y su atención al detalle hacen que cada uno de los tatuajes sea un reflejo de su pasión y creatividad.